Percy Julian: el alquimista de la cortisona sintética1
Percy Julian, nacido en Alabama durante la segregación, fue uno de los primeros afroestadounidenses en obtener un doctorado en Química. Se hizo conocido por su trabajo con los productos naturales. En 1935, él y su equipo sintetizaron la fisostigmina, que se usa en el tratamiento contra el glaucoma y que solo estaba disponible a partir de la planta denominada “haba de Calabar”. Durante la Segunda Guerra Mundial, el Dr. Julian se enfrentó al desafío de sintetizar la cortisona, un esteroide salvavidas usado para tratar la artritis reumatoide y que se extraía anteriormente de la bilis de los animales. Su proceso innovador no solo hizo que el fármaco se volviera más económico y accesible, sino que abrió las puertas para la síntesis de otras hormonas fundamentales. También desarrolló métodos para la producción de progesterona y otras hormonas sexuales.
Marie Maynard Daly: los misterios del colesterol se van resolviendo2
Marie Maynard Daly fue la primera mujer afroestadounidense en obtener un doctorado en Química. Su investigación se centró en el colesterol, los azúcares y las proteínas; y a través de sus estudios meticulosos, identificó varios tipos de colesterol y sus distintos comportamientos. Y así, sentó las bases para el diagnóstico futuro e innovadores tratamientos. La Dra. Daly fue profesora durante muchos años en numerosas universidades y apoyó programas para aumentar la inscripción de estudiantes de minorías en programas de ciencia y en el campo de la medicina.
James Andrew Harris: formó parte del descubrimiento de nuevos elementos3
A pesar de haber enfrentado prejuicios raciales en la década de 1960, James Andrew Harris se abrió camino en la química nuclear. Como investigador en el laboratorio Lawrence Berkeley, colaboró con otros científicos en la exploración de las fronteras de la tabla periódica. Harris formó parte del descubrimiento de dos nuevos elementos: el elemento 104 (rutherfordio) y el elemento 105 (dubnio); y se convirtió en el primer afroestadounidense en descubrir un elemento. Harris dedicó gran parte de su vida a ayudar a reunir a niños afroestadounidenses para que estudien Ciencia e Ingeniería en escuelas y universidades de todo el país.
Estos son solo algunos ejemplos del legado que los especialistas en química afroestadounidenses dejaron en el campo de la química. En la actualidad, muchas organizaciones trabajan para aumentar la diversidad en la fuerza de trabajo. Se incluyen programas como Futuro de la Iniciativa de Becarios en STEM, que brinda becas por $40 000 a estudiantes en los campos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas en las universidades y los colegios universitarios históricamente afroestadounidenses.