Suministro seguro de agua segura
El agua limpia del grifo para beber, cocinar y bañarse es fundamental para nuestra existencia cotidiana. Los desinfectantes con cloro, como el cloro elemental, el hipoclorito de sodio y el hipoclorito de calcio1, que se utilizan para purificar los suministros de agua, son fundamentales para nuestra salud. De hecho, casi todos los sistemas de desinfección de agua de los EE. UU. usan algún tipo de proceso a base de cloro.
Cada vez más, el agua limpia ingresa a los hogares y las aguas residuales fluyen a través de tuberías de cloruro de polivinilo (PVC), productos de la química del cloro. En muchos hogares, las tuberías de PVC reemplazaron a las tuberías de metal tradicionales. Las tuberías de PVC tienen la ventaja de ser inertes, es decir, no reaccionan químicamente con el agua que pasa por ellas ni con el suelo en el que pueden estar enterradas. Eso ayuda a garantizar que la calidad del agua se mantenga alta mientras viaja desde la planta de tratamiento hasta el grifo. Que las tuberías de PVC sean inertes también significa que suelen durar más que las de metal. Las tuberías de PVC también suelen ser mucho más livianas que las de metal, y su traslado a los sitios de construcción requiere menos energía.
Control del clima
Los productos de la química del cloro también pueden ayudar a mantener los hogares cálidos y acogedores en invierno, y frescos y cómodos en verano. La química del cloro se utiliza para producir los componentes químicos básicos necesarios para fabricar espuma de poliuretano para el aislamiento de paredes y techos. El aislamiento actúa como una barrera a las temperaturas exteriores, lo que ayuda a reducir el uso de combustibles fósiles y los costos de energía del hogar. Generalmente, las ventanas y los revestimientos de PVC ahorran energía, son duraderos y pueden salvar árboles al reemplazar las ventanas de madera. Además, el PVC es reciclable: según el Instituto del Vinilo, se reciclan mil millones de libras de vinilo por año2.
Superficies de la cocina y el baño
Las criaturas microscópicas que pueden alimentarse de carnes crudas o vegetales contaminados pueden causar estragos en nuestros hogares al infectar a los miembros de la familia y enfermarlos. Los desinfectantes con cloro se usan para ayudar a destruir los gérmenes transmitidos por los alimentos en las superficies de preparación de la cocina. Desinfectar adecuadamente las tablas de cortar, las encimeras y otras superficies en contacto con los alimentos con soluciones diluidas de lejía con cloro reduce el riesgo de contraer enfermedades transmitidas por los alimentos.
Los desinfectantes con cloro también se usan para desinfectar baños, y una solución diluida de lejía con cloro (hipoclorito de sodio) puede ser útil para limpiar las superficies del hogar cuando un miembro de la familia está enfermo con un “bicho” contagioso, como un virus del resfriado o la gripe.
Dispositivos de alta tecnología
Hoy en día, es difícil imaginar un hogar sin equipos de alta tecnología, que se basan en la tecnología informática. Los chips de microprocesador de silicio de estos dispositivos se fabrican mediante la química del cloro. En una mañana normal, usted puede recurrir a microchips de silicio para que lo ayuden a despertarse (reloj despertador), calentar el desayuno (horno de microondas), revisar el correo electrónico (computadora o teléfono inteligente), reproducir música (sistema de sonido estéreo) y mirar las noticias de la mañana (televisión).
Solución desinfectante
Mezcle ¾ de taza de lejía de cloro común en un galón de agua para hacer una solución desinfectante multiusos. Aplique a las superficies duras con un paño o una esponja; deje reposar cinco minutos. Enjuague bien y deje secar al aire. Siempre lea y siga las precauciones y las instrucciones de uso antes de usar los productos.
No más “cerveza pequeña”
En la Norteamérica colonial, mucho antes de la era del tratamiento municipal del agua, las familias bebían una bebida alcohólica débil llamada “cerveza pequeña”. Esta bebida proporcionaba una fuente de líquido sin poner a los miembros de la familia en riesgo de enfermedades transmitidas por el agua. El alcohol de la “cerveza pequeña” ayudaba a destruir los gérmenes que causan enfermedades que viven en el agua corriente, por ejemplo. Hoy, gracias al uso de los desinfectantes con cloro, el agua se desinfecta antes de que ingrese a su hogar, y puede beber esta agua del grifo con un alto grado de confianza de que no se enfermará.
Fuentes
- National Library of Medicine: https://pubchem.ncbi.nlm.nih.gov/compound/Calcium-hypochlorite
- The Vinyl Institute: https://www.vinylinfo.org/recycling/
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