Respuesta a preguntas
¿Qué es el formaldehído?
Todas las formas de vida (bacterias, plantas, peces, animales y humanos) producen formaldehído como parte del metabolismo celular. El formaldehído también es un elemento químico fundamental en la producción de cientos de artículos como vacunas o elementos de cuidado personal. No obstante, solo permanece una cantidad mínima o nula de formaldehído en los productos finales que usan los consumidores.
¿Debe causar preocupación la exposición de los consumidores al formaldehído?
El formaldehído es una sustancia muy regulada. Las regulaciones gubernamentales obligatorias establecen normas para proteger la salud humana y el medio ambiente. Estos requisitos permiten la producción, el almacenamiento, la manipulación y el uso seguro de esta sustancia química esencial. De hecho, el formaldehído es uno de los compuestos más estudiados en el mercado y su perfil de riesgo fue caracterizado correctamente. Se metaboliza rápidamente en el cuerpo, se descompone rápidamente, no es permanente y no se acumula en el medio ambiente. La Organización Mundial de la Salud, entre otros, ha llegado a la conclusión de que no hay evidencia científica que indique que los niños son más o menos susceptibles a la exposición al formaldehído que los adultos.
¿La exposición al formaldehído causa cáncer?
Se ha establecido en la literatura científica que cualquier asociación posible entre el formaldehído inhalado y el cáncer está ligada únicamente a exposiciones significativas y prolongadas al formaldehído inhalado. En función de los estudios científicos más recientes, es poco probable que el formaldehído inhalado pueda desencadenar en el organismo los mecanismos necesarios para causar cáncer de sangre (una forma de leucemia), porque el formaldehído inhalado no pasa más allá de los tejidos nasales (ya que se metaboliza rápidamente) y no llega a la médula ósea, donde se originan las enfermedades en la sangre.
El cáncer nasofaríngeo (NPC) es una forma muy rara de cáncer asociada con la exposición al formaldehído según un estudio realizado por el Instituto Nacional del Cáncer de 25 000 trabajadores en 10 plantas diferentes donde se utilizó o fabricó formaldehído. De los 10 casos totales de NPC en cuatro estudios realizados a casi 60 000 trabajadores industriales o embalsamadores con una posible exposición al formaldehído, seis procedían de una sola planta. Recientemente se ha informado que cinco de estos seis casos se debían, probablemente, a la exposición (antes o después de la jornada laboral) de los trabajadores a otros factores de riesgo para el cáncer del tracto respiratorio superior.
¿La revisión de 2014 que realizó el Consejo Nacional de Investigación (NRC) en el marco del Programa Nacional de Toxicología (NTP) sobre la aparición del formaldehído en el duodécimo Informe sobre Carcinógenos (Report on Carcinogens, RoC) (en la que el panel del NRC se mostró de acuerdo con la enumeración del NTP de formaldehído como "conocido como carcinógeno humano"), significa que el formaldehído presente en los productos del consumidor es perjudicial para la salud humana?
No. La Organización Mundial de la Salud ha indicado que la exposición normal de los seres humanos al formaldehído no representa un riesgo de enfermarse de cáncer. En el ámbito federal se examinó minuciosamente el formaldehído y está sujeto a la regulación de los productos de consumo y en el lugar de trabajo para controlar las exposiciones y proteger la salud humana. Con respecto al Informe sobre Carcinógenos, el Programa Nacional de Toxicología (NTP) declaró que “… su inclusión en el informe no establece que dichas sustancias representen un riesgo para las personas en su vida cotidiana”. Las conclusiones del Comité NRC no toman en consideración las exposiciones y los resultados difieren significativamente de las conclusiones y recomendaciones de un informe individual del Comité NRC de 2011 que revisó datos similares sobre el formaldehído.
¿Existe alguna conexión entre el formaldehído y el asma?
Varias agencias gubernamentales y organismos con científicos expertos han concluido que la evidencia científica no respalda ninguna asociación entre el asma y la exposición al formaldehído. La OMS concluyó que “[t]no hay evidencia que indique un aumento en la sensibilidad e irritación sensorial por formaldehído entre las personas que suelen considerarse como susceptibles (los asmáticos, los niños y las personas mayores)”. Un informe de la Academia Nacional de Ciencias resume los estudios clínicos controlados disponibles y evalúa si el formaldehído causa irritación en las personas asmáticas y las que no lo son; y no encontró diferencias en cuanto a la sensibilidad entre los dos grupos (NAS 2004, NRC, 2007): “… los individuos asmáticos expuestos al formaldehído en el aire en concentraciones de exposición iguales o inferiores a 3 partes por millón no parecen tener mayor riesgo de padecer una disfunción de las vías respiratorias en comparación con los individuos que no son asmáticos”.
¿Las personas pueden tener problemas de salud por los materiales de construcción producidos con formaldehído?
Los niveles de formaldehído habituales en los ambientes de interior están por debajo de 0,1 ppm (muy por debajo del umbral que provoca irritación sensorial en la mayoría de las personas). El gobierno federal, a raíz de la legislación del Congreso, está finalizando una regulación que nacionalizará los límites de emisión establecidos en virtud de las medidas de control de sustancias tóxicas en el aire de California para controlar las emisiones de formaldehído de los productos de madera compuesta. A lo largo de muchos años de esfuerzos de administración voluntaria y como consecuencia de la regulación de California, los productores de resina de formaldehído y los fabricantes de paneles de madera han empezado a distribuir productos que emiten los niveles de base propios de la madera.