Usos y beneficios
El dióxido de titanio puro es un polvo fino y blanco que proporciona un pigmento blanco y brillante. El dióxido de titanio se ha utilizado durante siglos en una gama de productos industriales y de consumo, lo que incluye pinturas, revestimientos, adhesivos, papel, plásticos y caucho, tintas de impresión, telas y tejidos recubiertos, así como cerámicas, revestimientos de suelos, materiales para techos, cosméticos, dentífricos, jabones, agentes para el tratamiento de agua, productos farmacéuticos, colorantes alimentarios, productos para el automóvil, protectores solares y catalizadores.
El dióxido de titanio se produce en dos formas principales. La forma principal, que comprende más del 98 por ciento de la producción total, es el pigmento de dióxido de titanio. La forma pigmentaria hace uso de excelentes propiedades de dispersión de la luz del dióxido de titanio en aplicaciones que requieren brillo y opacidad de blanco. La otra forma en la que se produce el dióxido de titanio es como un producto ultrafino (nanomaterial). Esta forma se selecciona cuando se requieren diferentes propiedades, como la transparencia y la máxima absorción de la luz ultravioleta, por ejemplo, en los protectores solares cosméticos.
Pigmento de dióxido de titanio
El pigmento de dióxido de titanio se utiliza en una variedad de aplicaciones que requieren una elevada opacidad y brillo. De hecho, la mayoría de las superficies y los elementos que son blancos y en tonos pastel, e incluso con matices oscuros, contienen dióxido de titanio. El pigmento de dióxido de titanio se utiliza en una variedad de aplicaciones que incluyen las siguientes:
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- Pinturas y revestimientos: el dióxido de titanio proporciona opacidad y durabilidad, y a la vez ayuda a asegurar la larga duración de la pintura y la protección de la superficie pintada.
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- Plásticos, adhesivos y caucho: el dióxido de titanio puede ayudar a minimizar la fragilidad, la decoloración y el agrietamiento que pueden ocurrir como resultado de la exposición a la luz. Esto puede mejorar la vida útil de muchos componentes de plástico y de caucho utilizados en los vehículos, los materiales de construcción y otras aplicaciones exteriores.
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- Cosméticos: el pigmento de dióxido de titanio se utiliza en algunos cosméticos para ayudar a ocultar las imperfecciones e iluminar la piel. El dióxido de titanio permite utilizar una capa más delgada de maquillaje y obtener el mismo efecto deseado.
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- Papel: el dióxido de titanio se utiliza para revestir papel, haciéndolo más blanco, más brillante y más opaco.
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- Materiales en contacto con alimentos e ingredientes: la opacidad a la luz visible y ultravioleta que ofrece el dióxido de titanio protege los alimentos, las bebidas, los suplementos y los productos farmacéuticos de la degradación prematura, lo que incrementa la durabilidad del producto. Además, se utilizan clases específicas de alta pureza de pigmento de dióxido de titanio en comprimidos de medicamentos, revestimientos de cápsulas y como una ayuda decorativa en algunos alimentos.
Dióxido de titanio a nanoescala o ultrafino
El dióxido de titanio ultrafino se utiliza con mayor frecuencia en las siguientes aplicaciones especiales:
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- Protector solar: el dióxido de titanio a nanoescala se vuelve transparente a la luz visible y a la vez actúa como un eficiente absorbente de la luz ultravioleta. Debido a que el tamaño de las partículas es tan pequeño, las nanopartículas de dióxido de titanio no reflejan la luz visible, pero absorben la luz ultravioleta, lo que permite una barrera transparente que protege la piel de los rayos dañinos del sol. De acuerdo con Skin Cancer Foundation, el uso de protectores solares que contienen dióxido de titanio puede ayudar a prevenir la aparición de cáncer de piel.
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- Catalizadores: el dióxido de titanio a nanoescala se utiliza como material de apoyo para aplicaciones catalíticas. En la industria automotriz, los principales usos incluyen la eliminación de las emisiones de gases de escape nocivos, y en centrales eléctricas, la eliminación de los óxidos nitrosos.